EDICIÓN INTEGRAL DE UNA DE LAS OBRAS MAESTRAS DEL CÓMIC EUROPEO CONTEMPORÁNEO
Cada verano, la familia Faldérault se sube a Don Bermellón, su 4L, y se dirige al sur para iniciar sus vacaciones. Pero estas nunca salen como ellos planeaban, y el anhelado viaje al sur se transforma anualmente en algo inesperado, ya sea una granja, un camping en Ardèche, un hotel en Saint-Étienne o una cabaña. Aunque esta incombustible tribu ?entre bromas, rituales y contratiempos? nunca dejará que nada le impida disfrutar de su merecido descanso.
Este integral recoge los seis volúmenes con los que Jordi Lafebre (Carta blanca) y Zidrou (Shi) nos han hecho enamorarnos de los Faldérault. En el transcurso de dos décadas, estas seis aventuras son seis dosis de felicidad de la mano de una familia entrañable que, casi sin darnos cuenta, se meterá en nuestros corazones.
UNA NUEVA ENTREGA DE LAS AVENTURAS Y DESVENTURAS DE LA ENTRAÑABLE FAMILIA FALDÉRAULT
El verano de 1980, Pierre Faldérault completa las últimas viñetas de su tebeo justo a tiempo para irse de vacaciones. La sorpresa es total para toda la familia, pero no es la única noticia emocionante: ¡han comprado, llave en mano, un chalé en la campiña francesa! Como cada año, la aventura es la propia esencia de las vacaciones, y las de este año van a marcar profundamente los recuerdos de la familia.
En esta cuarta entrega, Lafebre y Zidrou vuelven con otro episodio del respiro veraniego de los Faldérault. Bromas, rituales y problemas se unen a la determinación y alegría de vivir de esta familia que no va a permitir que ningún contratiempo le impida disfrutar de su merecido descanso.
El final de 1979 se acerca y, para cambiar la costumbre, los Faldérault deciden celebrar la Navidad al sol. Sin embargo, en estas vacaciones no estarán todos: Julie-Jolie se queda en casa para preparar sus exámenes y Louis decide huir a medio viaje para ver a Pink Floyd en Londres…
En las vacaciones más movidas de esta familia, Lafebre y Zidrou reflexionan sobre los cambios y sobre las decisiones que debemos tomar para vivir en consonancia con aquello en lo que creemos.